Crecer.

Según fueron pasando los años de su vida Sat fue cambiando. No lo hizo de la noche a la mañana, pero lo hizo.

A lo largo del tiempo fue dándose cuenta de como quería ser. Sus padres intentaban hacerle entrar en razón diciéndole que sería más sencillo (y a la vez ella sería más feliz) siendo una chica normal, pero ella se negaba.
Ellos lo siguieron intentando hasta que se dieron cuenta de que el árbol ya había crecido torcido, y que aunque ahora intentasen enderezarlo no lo conseguirían. Sat seguiría siempre igual. Llegados al punto más alto del cambio ya no se sufren variaciones.
Los "no cambies nunca" pocas veces se cumplen. A la vez que la vida cambia las formas de verla también. Ambas son directamente proporcionales.
Un día Sat decidió sonreir a la vida, decidió que tendrían una alianza entre las dos. Supongo que por ello la vida hizo que Sat fuese diferente, pero quien sabe cuál es la auténtica razón.

Realidades.

Sat se divide en dos mitades, que son más bien dos realidades. Le gusta pasar de una realidad a otra cuando se encuentra mal. Si en una realidad está triste o aburrida, cambia a la otra, y se soluciona.
Hoy se ha desesperado un poco en ambas realidades. En la primera, el teléfono no suena, y Sat está sola y aburrida. Cree no hay nadie en el mundo que no se haya sentido solo alguna vez, pero es que ella lo siente muy a menudo. La soledad no tiene edad. Hay niños pequeños que se sienten muy solos y sin embargo, nadie se da cuenta. Aunque parece muy fría, a Sat le gustan los abrazos, y las visitas. Sí, las visitas. No entiende porqué todo el mundo las detesta. Te hacen compañía cuando estás solo. Y si de verdad te has sentido solo alguna vez, creéme, adorarás las visitas.
En la otra realidad, Sat, también se ha disgustado. No entiende de cinismos, ni de tristeza, ni de enfados. Sat no entiende de nada de eso. No entiende que las personas a veces quieran estar tristes. Estamos en agosto, ahí fuera hace un sol radiante que transmite a cualquiera ganas de sonreir. Borremos la palabra tristeza del diccionario, borremos todas las de su campo semántico.
Borremos los enfados, los cinismos y la melancolía de domingo por la tarde.
Borremos el aburrimiento, hagamos que esta vida se convierta en sueño, al menos por un momento.

Latidos.

Lo que más adora Sat de la felicidad es el comportamiento de su corazón ante la misma. Adora levantarse de la cama y ver que su corazón, mediante sus sístoles y sus diástoles, le está dando motivos por los que sonreir. Lo malo es que esta circunstancia se da en contadas ocasiones de la vida. En mayor o menor medida según cada uno se tome la suya propia. Aunque el corazón es un órgano impulsor no siempre tiene ganas de trabajar (como todos) y a veces se vuelve algo vago, por ello hay que transmitirle ganas de latir, pero ganas de latir con fuerza, no latir por latir. A veces, Sat, en su intento de hacer al corazón latir fuerte y enérgico, salta muy alto, o corre una carrera, o sonríe durante un día entero sin cansarse. Pero aún así muchas veces no es posible. A veces necesitamos ver a alguien especial para nosotros, para que ese alguien transmita a nuestro corazón un impulso motor. Es como cuando hay que ponerle las pinzas de un coche a otro, un coche transmite la energía al otro que carece de ella en un determinado momento.

Pero los latidos de alegría verdaderos son inconscientes. Aparecen cuando menos nos los esperamos. Aparecen por casualidad.
Pero aún así, hay que luchar para conseguirlos.

Basura.

Sat hoy tiene un día antisocial. Los que ya la conocéis diréis: "¿Cuándo Sat está social?" Pero es que en este caso sí que lo está. Y totalmente en serio.
Aunque la mejor palabra para definir hoy a Sat sería sorprendida. En primer lugar, me refiero a la noticia reciente de la postulación de Paris Hilton para ser presidenta del gobierno. Imagínate, por un momento, poner los Estados Unidos en manos de una señorita para la cual lo primero que hay que solucionar es pintar la Casa Blanca de rosa . Pero como "está buena" se considera la candidata ideal para el gobierno. Detestable.


Sat también está indignada porque uno de sus grupos favoritos de todos los tiempos, los Ramones, están siendo confundidos con una marca de ropa. Y es que sus camisetas son compradas por adolescentes, el caso es que la mayoría de los compradores no conocen la existencia de dicho grupo. Compran las camisetas porque se las ven a los famosos, que igual que ellos las ponen ignorando de donde vienen en realidad.


Ya decía que Sat tenía el día antisocial.

Sat

Sat tiene dieciséis años, no es demasiado alta, tiene el pelo castaño y los ojos marrones como las hojas que se caen de los árboles en otoño. Supongo que de ahí venga que los meses de octubre y noviembre sean sus favoritos. Sus ojos a veces se muestran tímidos y deciden esconderse tras el flequillo de Sat, el cual sirve de paraguas y de visera a la vez. Justamente por su utilidad es la parte de su cuerpo que más le gusta.

Para saber como es Sat por dentro hay que llegar a conocerla muy bien. A menudo las personas se confunden y obtienen falsas conclusiones. Sat es tímida, pero por ello no deja de luchar por lo que cree. Sat es irónica, en ocasiones bromista. Sat tiene un corazón inversamente proporcional a su diminuto cuerpo.
A Sat le tiran del pie derecho las supersticiones, por eso cuando camina sacude dicho pie y entonces las supersticiones quedan sobre el suelo que pisa, quedando olvidadas por completo. En este sentido la vida de Sat es una completa ironía. Nació un trece de enero y su mejor amigo es un gato negro.
No se considera valiente, pero por contradecirse sí que considera que ser diferente es un gran acto de valentía. Sobre todo en este mundo.
Lucha por tener una vida diferente a la del resto. Lucha a su vez porque su vida sea distinta cada día. No cree en las medias naranjas, pero sí cree que todos podemos encontrar nuestro lugar en una persona después de mucho tiempo de búsqueda.

El mundo.

Os voy a contar una historia. Una historia real. Como os podréis imaginar la historia no será bonita, ni alegre en muchos casos, porque la realidad no lo es. Eso sí, como todas las historias tendrá grandes momentos que serán los que merezcan la pena y los cuales iréis transportando a lo largo de vuestra vida sin separaros de ellos. El mundo es un lugar feo y oscuro, lleno de injusticias y males. Un lugar donde si no sigues unas pautas y quieres ser diferente acabas pagándolo. Un lugar regido por clones para crear otros clones. Personas vacías, que pueden ser manipuladas con cualquier razonamiento de alguien a quien consideran superior por muy alocado que sea dicho razonamiento.

Esta historia trata de ridiculizar los estándares actuales, trata de hacer que se ignoren los modelos que consideramos como ideales, y por último, trata de hacer que reflexiones sobre lo que puedes ser si piensas por tí mismo y no te dejas arrastrar por toda esa suciedad que hemos nombrado.